lunes, noviembre 24, 2008

La poesía de las ciudades

Lee Friedlander

"Ha llevado al hombre muchas generaciones percibir la poesía del macrocosmos que habita; muchos siglos tuvieron que transcurrir para que advirtiera la belleza de las montañas y el musgo. Así, pues, ¿no sería razonable argumentar que aún lleve al hombre un cierto número de generaciones advertir la poesía del microcosmos que habita, que necesite algún tiempo para percibir la belleza de las grandes chimeneas de las fábricas o de las tiendecitas de juguetes de Londres? ¿Acaso sería imposible sostener que algún poeta del futuro no logrará hablar con facilidad del exquisito color morado de las chimeneas en el horizonte como si se tratara de montañas distantes, de los cables de telégrafo que irradian desde el terminal como una tela de araña a la entrada de una cueva o del brillo de piedras preciosas de las farolas nocturnas igual que del brillo de gemas de las estrellas? Quizá resulte ridículo incluso profetizar tales transformaciones de la sensibilidad. Pero igualmente ridículo le habría parecido a un hombre de la Edad de Piedra oír que el fuego o el agua propiamente dichos pudieran considerarse poéticos. [...]"

La poesía de las ciudades
Lectura y locura (artículos publicados entre 1901 y 1911)
Gilbert K. Chesterton




3 Comments:

Blogger C. said...

Ya lo tienes!!!!!!!!!!!!!!! AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!

Serás...tú! Qué ganas de comparlo.

11:11 a. m.  
Blogger g said...

Efectivamente, se cuenta entre mis asaltos bibliófilos del mes manirroto.
Un acierto. Y la edición de Espuela de Plata es un gusto: es bonita, pesa poco y, aunque no lo parece, se abre bien.
Un lujo.

Te chinchas :P

1:13 p. m.  
Blogger grankabeza said...

Vaya par de dos...

1:29 p. m.  

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